Bienvenidos a Conociendo tu alma!

BIENVENIDOS A CONOCIENDO TU ALMA!!!

Infinitas gracias por estar aquí!. Sin cada uno de Uds. no sería posible seguir adelante. Este blog, lo he creado para brindarnos la oportunidad de descubrir en conjunto porque estamos aquí, cual es el motivo por el cual Dios nos envió a este mundo, por eso el nombre del blog: CONOCIENDO TU ALMA!!!

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Mil bendiciones para tí!

lunes, 31 de octubre de 2016

KARUNA PRACTITIONER I Y II - 30 DE OCTUBRE 2016


Hermano cuerpo

POR VIRGINIA GAWEL
Fuente: http://www.sophiaonline.com.ar/

Nuestro cuerpo, casa sagrada, el espacio que nos alberga en nuestro paso por la vida. ¿Alguna vez lo trataste tan mal que te dolió el alma? Siempre se puede pedirle perdón…

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   Así te llamó San Francisco de Asís: hermano sol, hermana luna, hermana montaña, hermano ciervo… hermano cuerpo. Nuestra cultura, en cambio, ha ido olvidando tu cualidad principal, para envolverte en ropas según las modas, subirte y bajarte de automóviles y ascensores, plancharte cuando te vas arrugando, ondularte el pelo si es lacio (o enlaciártelo si es rizado), depilar tus arbóreos matorrales, adelgazarte, rellenarte por donde te falte, aspirarte por donde te sobre, subirte a insalubres tacones, perfumarte tus salvajes emanaciones, tenerte sentado en el más cúbico sedentarismo para luego hacerte correr hasta el desfallecimiento… Hermano cuerpo, te decía: nuestra cultura ha ido olvidando tu cualidad principal: tu naturaleza sagrada.

   No hablo necesariamente de ninguna religión, no: hablo de que te faltamos al respeto todo los días, de mil y una maneras, y lo tenemos como algo “natural”. Tu condición briosa, afín a la de todos los demás animales, a la de las plantas que se yerguen buscando la luz, a la de los ríos que cantan en las cascadas, ha sido envasada, tipificada, rotulada. Y nuestra cultura nos dice que nunca, nunca serás suficiente: suficientemente hermoso, suficientemente joven, suficientemente bello, suficientemente sano…

   Querrás irte de los ascensores, los subterráneos y el bullicio interminable, a retozar por donde perteneces; tus piernas se moverán en las salas de espera, y tendrás insomnio porque no querrás dormir en un cubículo. Entonces te empastillarán hasta amansarte. Hasta que tu tristeza de animal expatriado sea acallada con más pastillas. Y si se te ocurre enfermar, habrá muchas manos restregándose para negociar qué parte de tu noble presencia pinchar, exprimir, cortar, infiltrar. (También debo decírtelo: algunas de esas manos serán bondadosas, sí; algunas sabias, también. Podrán ayudarte. Y otras serán más peligrosas que galopar en la niebla).

cuerpo-sagrado-escapar   Pero vamos a algo más simple, Hermano cuerpo. No “nuestra cultura”. Yo. Yo, entre tus entrañas, ida y vuelta por tus nervios, sostenida por tus huesos, hasta exhalar tu aliento definitivo. No somos lo mismo, no: cuando mueras, seguiré viaje, como el Principito al dejar su cáscara en el desierto. Pero aquí, ahora, somos Uno: mi prójimo más próximo, hermano cuerpo.

   Y yo, que amo a los animales tanto y tanto, que desde niña no ha habido foto mía en que un animalito no estuviera conmigo… te traté como jamás trataría a ningún otro animal. El día que lo supe lloré de vergüenza: te había hecho acostar a la hora en que ya tendría que haberte arropado como a un niño… te odié en el espejo porque no eras como yo quería… te di de comer lo que jamás le daría a ningún otro animal… te exigí lo que no le hubiera pedido a nadie a quien amara. Pues no te amaba.

   Hoy ya me has perdonado, pues te he pedido perdón. Y enmendé. Pero debo recordar todos los días (tú, que albergas a esta alma extranjera, casa de carne, de sangre y de sonidos): eres el único animal que puedo acariciar desde adentro. Elaborado con la tierra y con los soles, necesito contar contigo y que cuentes conmigo. Es mi deber, en reciprocidad sagrada. Te diré “gracias”, sí, cuando me vaya. Pero hoy te digo “gracias”, y más “gracias” en cada acto, porque estoy. Es decir: porque gracias a que estás aquí (donde despliego mi destino), aquí estoy.
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Espero te resulte de interés, Blanca


domingo, 30 de octubre de 2016

Una revolución de autoridad

Tomado de la revista ¿Que es la Iluminación? (WIE) Primavera/Verano 1996, Vol. 5, nº 1, págs. 26-27.

Fuente: http://www.viviragradecidos.org/

Generalmente se entiende “autoridad” como “poder para mandar”. Sin embargo, ésta no es la acepción original. Jesús revolucionó el concepto de autoridad, colocando la autoridad divina en los corazones de las personas, y encomendando a la autoridad humana la tarea de empoderar a quienes están a su cargo. Un artículo que ayudar a identificar a los auténticos guías.

autoridad1   Actualmente tenemos una idea muy pobre y en realidad muy distorsionada de la autoridad, y pensamos que la autoridad es el poder para mandar. Esto es un concepto equivocado; no es su significado primero, sino un significado derivado de la autoridad. Originalmente autoridad significa una base sólida para el conocer y el obrar. Si uno quiere saber lo que debe hacer en un caso concreto, normalmente uno consulta un libro autorizado, o consulta a una persona que sea una autoridad en la materia, etcétera.

   Éste es el significado original “autoridad”. Sin embargo, dado que las personas que proporcionan una base sólida para conocer y actuar son pocas y distantes entre sí, se los coloca en una posición de autoridad, lo que significa que uno les da ese poder de mando. Cuanto más poder alguien tiene, mayor es el peligro de corrupción, y es aquí es donde algunos maestros espirituales pierden los estribos. Aquí es donde la cuestión del uso adecuado de la autoridad entra en juego.

   Jesucristo introdujo una revolución en la comprensión del sentido de la autoridad. Ésta es, creo, la concepción central de la tradición cristiana, y potencialmente su mayor contribución a la espiritualidad en el mundo. Esta revolución se produjo de dos maneras. En primer lugar, Jesús colocó a la autoridad de Dios, que siempre fue vista como algo externo, dentro de los mismísimos corazones de sus oyentes. La enseñanza central de Jesús no es, “Yo voy a decirles a todos ustedes”, ni nada de eso. No; él supone que ya lo sabemos todo. “¿No lo sabes? Te lo recuerdo. Ustedes lo saben todo.” Esto es lo típico de sus comentarios. Esta pregunta abre muchas de sus parábolas: “¿Quién de ustedes no lo sabe ya?” Esto no está suficientemente enfatizado en la catequesis cristiana actual, pero si nos lo hacen ver nos damos cuenta de que es cierto.

   Por lo tanto, uno de los eventos más dramáticos que sucedieron en la historia (y es por ello que el mundo todavía se está reponiendo de lo sucedido en la vida de Jesús) es que con él, la autoridad divina se colocó de lleno en el corazón de cada ser humano. Esto significa una tremenda revolución. Ella nos habla de la inmanencia de Dios y de lo divino en el corazón humano. Probablemente era necesario que esto ocurriera en un entorno en el que la dualidad era más fuerte que en cualquier otro lugar: “Santo” en la Biblia hebrea significaba “el totalmente Otro.” Para los judíos, Dios era el absolutamente otro. Jesús no lo niega en modo alguno, pero también nos dice que ese absolutamente otro está más cerca nuestro que lo que nosotros lo estamos de nosotros mismos. Éste es el primer aspecto de esta la revolución de la autoridad; la autoridad divina se coloca en el mismo corazón de la tierra.

   El segundo aspecto tiene su mejor expresión en la imagen de Jesús lavando los pies de sus discípulos y diciéndoles: “Ustedes me llaman Maestro y Señor. En otras palabras, me tienen por una autoridad. Tienes razón, es lo que soy. Pero en el mundo, quienes tienen poder lo hacen sentir a los demás. Con ustedes debe ser diferente. El mayor entre ustedes, el que tenga más poder, debe ser el siervo de todos. Esto es lo que quiero inculcarles al lavarles los pies.” Jesús responde así a la pregunta sobre la utilidad de la autoridad. La autoridad debe ejercerse, pero sólo hay una forma legítima de ejercerla: es el conferirle poder a las personas que están bajo la autoridad. Una de los aspectos más notables de Jesús es que, teniendo autoridad, nunca cayó en las garras de su poder. Incluso enfáticamente les inculcó a sus seguidores que no debían buscar el poder, sino convertirse en servidores de todos. En resumen: en primer lugar, la autoridad divina se colocó en los corazones de todos; en segundo lugar, a la autoridad humana se le encomendó una tarea: la de no desalentar a los que están bajo esa autoridad, sino motivarlos y conferirles poder.

   Esto también nos sirve para poner a prueba a los guías espirituales, y ver cuáles son auténticos y cuáles no lo son. ¿Utilizan su poder para conferir poder a los demás? Es cierto que puede haber una etapa en la que uno tiene que ser tratado como un niño; que puede haber una etapa de dependencia por la que uno tal vez tenga que pasar. Pero hay que mirar el panorama completo. Ante cualquier guía espiritual, uno debe fijarse en sus seguidores y ver hacia dónde los está llevando su guía. Cuando uno ve que ese maestro ayuda a sus discípulos a valerse por sí mismos, entonces es un guía auténtico. Por el contrario, cuando uno ve que el maestro los hace cada vez más dependientes, estamos ante un peligro.
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sábado, 29 de octubre de 2016

Agradecidos a pesar del dolor

Artículo reproducido con permiso de gratefulness.org

Fuente: http://www.viviragradecidos.org/   


Compartimos el testimonio de Bruce F. Singer, psicólogo dedicado al tratamiento de pacientes aquejados de dolor crónico, quien habla del poder de la gratitud como herramienta para aliviar el sufrimiento. “La gratitud no calma el dolor, pero ayuda a aliviar las ataduras del sufrimiento. Nos ayuda a enfocarnos en lo que tenemos y no tanto en lo que hemos perdido”.

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   Mi trabajo con personas aquejadas de dolor crónico ha sido, para mí, una lección constante sobre el poder de la gratitud. Ayudar a las personas a cultivar el agradecimiento para cambiar su relación con el dolor físico, partiendo del sufrimiento emocional hasta llegar a la aceptación, ha sido el centro de mi trabajo. Es verdad que por momentos no ha sido fácil. A menudo me preguntan: ¿Por qué una persona que lleva años con un dolor debilitante debería encontrar algo por lo que estar agradecida? Y, ¿cómo la gratitud puede ser una herramienta efectiva para aliviar el dolor?

   Sin embargo, la misma simplicidad del agradecimiento es la llave para liberar al corazón de la cárcel de la depresión, la ira y el temor. Al compartir con mis pacientes una nueva perspectiva del agradecimiento, comienzo preguntándoles hacia qué podrían sentirse agradecidos en la misma habitación donde estamos sentados. Sorprendentemente, o quizás, desafortunadamente, esta pregunta choca, a menudo, con un confuso silencio. Los cuadros, las ventanas, las sillas, el termostato, hasta el televisor en la pared pasan desapercibidos, como si el dolor los hubiera hecho invisibles. Recuerdo a un hombre que me dijo que en la habitación no había nada en absoluto por lo que estar agradecido. Entonces me levanté y accioné la llave de la luz. El hombre literalmente saltó de la silla, como si la luz del agradecimiento se hubiera encendido en su mente y en su corazón.

   ¿Cuán fácil es permitirnos ser agradecidos? A mis pacientes suelo contarles que estando en un aeropuerto muy concurrido ordené una hamburguesa en un puesto de comidas muy concurrido también. Encontré un asiento y me tomé unos pocos minutos para comer antes de dirigirme a la puerta de embarque. Y al volver a pasar por el puesto de comidas mientras salía, me detuve y vi a la cocinera en el fondo del salón. Le grité: “¡Gracias por la hamburguesa, estaba muy buena!” En ese momento la cocinera del aeropuerto se transformó en chef; me dedicó una amplia sonrisa y me agradeció también. ¿Cuánto me costó esto? ¿Diez segundos de mi tiempo? Diez años después, todavía sigo contando esta anécdota.

   En los grupos donde enseño el valor de la gratitud, termino la reunión mostrando el video del hermano David Steindl-Rast “Un Buen Día”. Les pido a mis pacientes que presten atención y escuchen detenidamente. Algunos lloran. Otros dicen que es hermoso. Cuando, una vez terminado el video, les vuelvo a preguntar a qué pueden estar agradecidos, nadie se queda sin decir algo.

   La gratitud no calma el dolor, pero ayuda a aliviar las ataduras del sufrimiento. Nos ayuda a enfocarnos en lo que tenemos y no tanto en lo que hemos perdido. Nos lleva a una comunión con la aceptación y con la indulgencia, y estas, a su vez, abren nuestro espíritu a una mayor flexibilidad y resiliencia. En mis grupos rara vez hablo de aquello hacia lo que estoy agradecido, pero si me lo preguntaran, diría: “Estoy agradecido a la gratitud misma”.
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viernes, 28 de octubre de 2016

SABADO 29 DE OCTUBRE - GUIA ASTROLOGICA por RCR 750AM


Destino, libertad y responsabilidad

Fuente: http://www.viviragradecidos.org/


¿Qué es el destino? ¿Somos libres frente a él? ¿Somos responsables de nuestras acciones? Reflexiones del psiquiatra Viktor Frankl, sobreviviente de varios campos de concentración y fundador de la Logoterapia. Nuestro destino único e irrepetible es el suelo sobre el que nos erguimos, y cada paso que damos es un acto libre: “ El hombre es un ser que va liberándose a cada paso de aquello que lo determina”.

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   La responsabilidad significa siempre responsabilidad ante un deber. Ahora bien, los deberes de un hombre sólo pueden ser interpretados partiendo de un “sentido”, del sentido concreto de una vida humana.

   ¿Y qué es, pues, la responsabilidad? Responsabilidad es aquello de lo que se nos “hace” responsables, aquello que “re-huímos”. Es terrible saber que en cada momento soy responsable del siguiente momento; que cada decisión, la menor igual que la mayor, es una decisión “para toda la eternidad”; que en todo momento estoy realizando una posibilidad, la responsabilidad de ese momento único, o la estoy perdiendo. Por otra parte, cada momento encierra en sí miles de posibilidades, y yo no puedo elegir más que una sola a realizar. Pero con esto quedan condenadas todas las demás, quedan destinadas a no ser jamás, y esto también ¡“para toda la eternidad”! Pero es maravilloso saber que el futuro (el mío y de las cosas con él, el futuro de los hombres en torno mío) depende de alguna manera –aún cuando fuera en un grado insignificante– de la decisión que yo tome a cada instante.

   La responsabilidad del hombre, cuya forma de conciencia trata de facilitar el análisis de la Existencia, es una responsabilidad encuadrada dentro del carácter peculiar y singular de su existencia, como algo único y que sólo se vive una vez. El existir humanamente consiste en ser-responsable en vista de la finitud. Ahora bien, esta finitud de la vida, como finitud en el tiempo, no la priva del sentido; al contrario, es la muerte la que le da sentido a la vida. El carácter singular de la vida lo lleva consigo respecto a toda situación; la peculiaridad de la vida lleva también consigo la peculiaridad del destino. En términos generales, podemos decir que el destino es –al igual que la muerte–, de un modo o de otro, parte constitutiva de la vida. El hombre no puede nunca, por mucho que haga, salirse del marco original e irrepetible de su destino. Si maldice su destino (es decir, aquello contra lo que nada puede y en lo que no tiene responsabilidad ni culpa alguna) es porque no llega a comprender el sentido del destino.

   Dentro del marco de su destino exclusivo, cada hombre es insustituible. Es lo que hace que el hombre sea responsable de la conformación de su destino. Tener un destino significa tener cada uno su destino. Con su destino peculiarísimo el individuo está, como si dijéramos, solo en todo el universo. Su destino no se repite. Nadie vendrá al mundo con las mismas posibilidades que él, ni él mismo volverá a tenerlas. Las ocasiones que se le brindan para la realización de valores creadores o vivenciales, el destino con el que realmente tropieza –es decir, aquello que el hombre no puede modificar, sino que debe soportar en el sentido de los valores de actitud–: todo esto es algo único y que solo se da una vez.

   Cuán paradójico es querer rebelarse contra el destino se ve claramente cuando alguien se pregunta qué habría sido de él, cuál habría sido su vida, si no hubiese tenido el padre que realmente tiene o sido hijo de otra persona. Quien se pregunte tal pregunta olvida que en tal caso no sería propiamente “él”, pues el portador sería otra persona completamente distinta, razón por la cual no podría ya hablarse, en rigor, de “su” destino, sino del destino de otro. Por tanto, el problema de la posibilidad de tener otro destino, un destino distinto, es de por sí imposible, contradictorio y carente de sentido. El destino es parte del hombre, como el suelo a que le ata la ley de gravedad, sin la cual no se podría dar. El hombre tiene, en efecto, que mantenerse erecto sobre su destino, como se mantiene erecto sobre el suelo que pisa y en el que tiene que afirmar el pie para saltar hacia su libertad. Libertad sin destino es imposible; la libertad sólo puede ser libertad frente a un destino, un comportarse con el destino.

   El hombre es libre, indudablemente, pero ello no quiere decir que flote independientemente en el vacío, sino que se halla en medio de una muchedumbre de vínculos. Pero estos vínculos son propiamente el punto de apoyo de su libertad. La libertad presupone vínculos, tiene que contar con vínculos. El “tener que contar” no significa sometimiento. El suelo sobre el que el hombre se planta es trascendido a cada momento en la marcha, y es suelo sólo en la medida en que es trascendido y sirve de trampolín. Si quisiéramos definir al hombre, habíamos de hacerlo como un ser que va liberándose a cada paso de aquello que lo determina; es decir, como un ser que va trascendiendo todas estas determinaciones al superarlas o conformarlas, pero también a medida que va sometiéndose a ellas.

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   Esta paradoja define el carácter dialéctico del hombre, uno de cuyos rasgos esenciales es el permanecer perennemente abierto y problemático para sí mismo: su realidad es siempre una posibilidad, y su ser, un poder-ser. El hombre no se agota nunca en su facticidad. Ser hombre, podríamos decir, no consiste en los hechos sino en las posibilidades.

   La existencia humana es ser-responsable, porque es ser libre. Es un ser que –como dice Jaspers– decide cada vez lo que es: un “ser-que-decide”. Es precisamente “Existencia” (Dasein, “ser-ahí”, ser concretamente “aquí y ahora”), y no está siendo simplemente, como una cosa (Vorgandensein, estar delante, hallarse, en terminología de Heidegger). La mesa que está delante de mí es y seguirá siendo lo que es por su parte, es decir, si alguien no la hace cambiar, no cambiará; en tanto que la persona que está sentada a la mesa frente a mí, decide por sí misma lo que “es” en el momento siguiente, lo que me ha de decir u ocultar.

   Lo que caracteriza su Existencia como tal es la multiplicidad de posibilidades distintas, de las que su ser sólo realiza una en cada caso. (Ese ser peculiar del hombre llamado Existencia podría caracterizarse también como “el ser que yo soy”.) El hombre no se sustrae en ningún momento de su vida a la forzosidad de optar entre diversas posibilidades. Solo que puede hacer “como si” no tuviese opción ni libertad de decidir. Este “hacer como sí” forma parte de la tragicomedia del hombre. Son muchos los chistes en que resalta la situación cómica del hombre no consciente de su esencial libertad de decisión. Uno de ellos es el marido que explica a su mujer cuán inmoral es la humanidad moderna, ofreciéndole como ilustración lo siguiente: “Hoy, por ejemplo, me he encontrado en la calle una cartera llena de billetes; pues bien, ¿crees que me ha pasado por la cabeza entregarla en la oficina de objetos perdidos?” ¿Qué es lo cómico de la situación? El ver que alguien nos habla de su propia falta de moral como si no le cupiera responsabilidad alguna. Este hombre hace como si hubiese que aceptar su falta de moral como un hecho dado, del mismo modo que la inmoralidad de los demás; como si no fuese libre y no estuviese en condiciones de decidir si debe quedarse con la cartera encontrada o entregarla en la oficina correspondiente, para que vuelva a manos de su dueño.

   La libertad de toda decisión, lo que se llama el libre albedrío, es algo obvio para el hombre sin prejuicios; tiene experiencia directa de sí mismo como libre.
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jueves, 27 de octubre de 2016

Soltar, morir, renacer

Por: Virginia Gawel

Fuente: http://www.viviragradecidos.org/


Podemos quedar “enganchados” o “atrapados” respecto de situaciones, lugares, personas… El desapego es difícil porque aquello a lo que nos apegamos pasa a ser parte de nosotros mismos, incluso a nivel de nuestras conexiones neuronales. Virginia Gawel presenta este síndrome desde la mirada de Pema Chödrön, monja budista. Una invitación a conectarnos con el verdadero Yo que subyace a todo cambio.
soltar

Pema Chödrön y el síndrome shenpa

   Una etapa que termina, una pareja que se disuelve, los hijos que se van de la casa, amigos que quedan en el camino, cambios en nuestro cuerpo, en nuestro entorno, en nuestro trabajo… Algo muy dentro nuestro quisiera que todo se quedara quieto; así estemos anhelando el cambio, le tememos (¡y mucho más cuando no lo anhelamos!) Pero la vida es impermanencia. Y esa impermanencia es, curiosamente, la que, si trabajamos sobre ella, puede vincularnos con algo inmutable que es nuestro núcleo.

   En la psicología del budismo tibetano hay una palabra para definir parte de lo que nos sucede ante este tipo de situaciones: shenpa. Se lo considera un síndrome (un conjunto de signos internos que trastorna nuestra vida emocional y mental). El concepto occidental que más se le aproxima es “apego”. Pero como a los tibetanos les encantan las metáforas (las cuales llegan más profundo que las definiciones meramente racionales), insisten en que la traducción implicaría imágenes como la de “sentimientos pegajosos”, “quedar enganchado” (sí, como con un gancho), y, como dice Pema Chödron, implica un sentimiento de urgencia. Urgencia por controlar al otro, urgencia por disimular el paso del tiempo (cuando nos apegamos a una etapa, un cuerpo que ya no tenemos, un rol que ya no cumplimos), compulsión por actuar de un modo que nos es habitual (sentimiento muy similar al de requerir una sustancia estando en situación de adicción)… Urgencia por lograr que se nos pase la ansiedad del cambio, como quien siente picazón (dice Pema) y quiere rascarse ya para que se le pase ya.

   Cuando realmente abordamos el trabajar con un apego determinado (lo cual es una tarea honda, compleja, dolorosa… y liberadora), lo que estamos haciendo, al intentar una y otra vez soltar, es ser pacientes escultores de nuestro cerebro. ¿A qué me refiero? Parte del apego está ligado a que las neuronas se han conectado muchas, muchas veces, de una determinada y única manera en relación a aquello a lo que estamos apegados. Al realizar un proceso interno de desapego estamos (como el adicto en relación a su sustancia) desactivando ese modo habitual (de allí la palabra “hábito”, aunque sea emocional) con el que el cerebro ha ido funcionando. Con ello, estamos retejiendo conexiones neuronales que ya no se ligarán en forma automática en el repetido circuito de siempre.

   De modo que cuando alguien logra soltar, cuando alguien consigue tenerse paciencia en ese largo proceso, lo que ha hecho es modificar su cerebro (¡lo cual implica un honroso mérito!) y, con ello, modificar el modo en que cerebralmente está codificada lo que uno llama “mi identidad”. Sí: la noción de “mi identidad” también implica un conjunto de conexiones neuronales, que van desde el esquema corporal registrado en el cerebro al modo en que nos tratamos día tras día, lo que pensamos sobre nosotros, lo que sentimos hacia nosotros, nuestras creencias sobre lo que somos y sobre cómo deberíamos actuar ante cada situación… Cuando estamos bajo el síndrome, eso que no logramos soltar está incluido como si fuera parte del mapa interno al que denominamos “yo”. Por eso no lo soltamos: porque sentimos tanto dolor como si estuviésemos por padecer (o padeciendo) una amputación. Hasta que, si uno trabaja sobre sí, logra ir soltando (prefiero este gerundio) y, con ello, modificar el concepto de “yo”. Y ver que no hubo amputación alguna: se sigue estando entero, pero de otra manera, aunque eso que ya no está, no esté. En síntesis: cambia la sensación de identidad. Y si lo que hacemos es realmente soltar (es decir, no “despegarnos” de una pareja, por ejemplo, para aferrarnos dependientemente a otra), estaremos listos para vincularnos con nosotros mismos y con la vida de una manera diferente: libre. Y el mapa interno de lo que llamamos “yo” será más amplio y certero: tendrá una relación más ajustada y legítima con la realidad, porque ya no estará incluido en él -como parte de ese “yo”- aquello a lo que estábamos apegados.

shenpa   Soltar es un ejercicio para toda la vida, para cada día, en cada pequeño acto. No significa permanecer inerte, indiferente, como la falsa imagen del yogui que parece estar “más allá del bien y del mal”. Es estar plenamente vivo, relacionándonos intensamente con lo que hoy somos, con lo que hoy hay, con lo que hoy es, y no con lo que éramos, lo que fue, lo que ya no está (o lo que quisiéramos que sea o hubiese sido).
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miércoles, 26 de octubre de 2016

El Alma escoge a la familia en la que quiere nacer hasta 3 meses antes de la concepción

Estracto del libro LOS NUEVE PELDAÑOS de Anne Givaudan y Daniel Meurois
Fuente: https://www.facebook.com/FrancisBocazPino

 EL ALMA ESCOGE A LOS PADRES Y A LA FAMILIA, dónde va a nacer hasta 3 meses antes de la concepción (así que eso de que uno no escoge a la familia donde nace, es mentira. Lo hacemos porque serán nuestros mejores maestros de vida).

   El alma del bebé va y viene a su cuerpo físico a lo largo de los 6 primeros meses. A partir del 6º mes el alma del bebé permanece más tiempo dentro de su cuerpo físico y menos fuera de éste.

13879214_567879283416950_539051408690040290_n   Para el bebé, para el alma y su consciencia, cualquier ritmo de vida estresante y estridente puede afectarle y provocarle rechazo a la hora de ocupar su cuerpo físico. Las almas sufren mucho al nacer, más que cuando mueren. El alumbramiento es un acto muy importante, muy respetuoso y necesita mucha paz, tranquilidad, armonía y amor. Los miedos a la hora del alumbramiento sólo provocan mal estar en el alma que hasta el último momento sufre y tiene dudas de si nacer o no. El amor puro a la hora de la concepción es lo que hará que el alma que acuda sea de una vibración mayor. El amor en el hogar es lo que más nutre al bebé y lo colma de paz y tranquilidad. La estabilidad emocional de la mamá y de su entorno es vital para que el alma del bebé se sienta acogida y se desarrolle a gusto dentro de su nuevo cuerpo físico.

   ”¡Hay que dejar de infantilizar a los que vienen! Hay que dirigirse a ellos con palabras que sean palabras y frases que parezcan frases; y además, con una grandeza de espíritu que no se transforme en tentativa de anexión de personalidad de recién nacido. Los padres deben mantener abierta su conciencia dejando de dirigirse a ellos con unos términos y unas ideas deformadas, atrofiadas. Si no lo hacen así les saturan la conciencia de somníferos. Hay que ofrecer ternura… Sin olvidar una semilla de inteligencia. Con mucha frecuencia, por desgracia, los padres ahogan la irradiación mental de su hijo desde los primeros momentos, pues no ven en él una individualidad que hay que canalizar y respetar, sino una materia a modelar que les pertenece.
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martes, 25 de octubre de 2016

UNA MIRADA ASTROLOGICA: TOMA DE VENEZUELA 26-10-2016

Analizando la carta del Cero de Aries 2016 para Venezuela, que es aquella, que nos permite conocer el estado de los gobernantes, y encontrando como regente de la puerta del año al SOL, el cual es el planeta más próximo a la cúspide de uno de los cuatro ángulos principales, ubicado en la casa IV, pues es obvio que Nicolás Maduro, dará mucho de que hablar hasta el próximo Cero de Aries del 2017.

Ahora bien, en vista de que muchos me han preguntado… que ves para mañana 26 de Octubre, día de la Toma de Venezuela, quise hacer un pequeño análisis para saber que esperar:



A la casa I de la carta del Cero de Aries (rueda interna),  le está llegando la Rueda de la Fortuna E, que  viene de la casa V, por lo que la suerte y la creatividad acompaña este evento.

En la casa IV, encontramos al Sol ., que como ya dije representa al gobernante, y sobre él LA LUNA / (el pueblo)  junto a MERCURIO M  (los estudiantes), todos juntos exigiéndole al gobernante.

Luego encontramos  Saturno  t, que representa a los políticos de derecha en la casa VIII: ¿ocultando qué?, ¿Será por eso, que recientemente volvió a surgir el difunto “DIÁLOGO”… para seguir ganando tiempo e indulgencia?

Después tenemos al Nodo Norte 0, representando una puerta que se abre que viene del extranjero o de la Santa Sede y que puede representar una salida creativa.

Y por último encontramos a Plutón P, quienes son la minoría con poder que somete al pueblo, y quien está tratando de dominar al mismo, representado por la LUNA /. Pero ojo, ese Plutón P, también puede representar a los extremistas y terroristas, así que precaución en la marcha.


Así que como ven… esto no es definitivo… pero si creo que será una demostración de que una vez más, el pueblo exige su derecho al REVOCATORIO!! 

Ahhh, pero se me había olvidado que también está vigente la lunación del 16 de Octubre, donde LA LUNA / (el pueblo) está opuesta al SOL . (el gobernante), que está junto a Urano u, que representa a los liberales, pero también lo inesperado y lo imprevisto, así que no les extrañen las sorpresas... 



Astrólogo: Blanca De León






Quédate con aquellas personas con las que puedes ser tú en toda tu esencia

Fuente: Raquel Aldana  www.lamenteesmaravillosa.com
Visto en: https://sanacionholisticasalamanca.wordpress.com

   Hay personas que sacan lo más sincero, genuino y verdadero de nuestro interior, toda nuestra esencia. Son aquellos que profundizan en nosotros, que exprimen nuestra esencia y que nos hacen disfrutar de lo maravilloso que es sentirse bien siendo uno mismo.

quc3a9date-con   Son esas personas que tienen algo que no sabemos definir, que nos invitan a tener plena confianza y a sentirnos con total libertad para comportarnos como queramos y como nos pide el cuerpo en cada momento…

   Poder ser uno mismo se ha convertido en una excepción más que en una regla actualmente, lo que ocasiona que muchas veces nos sintamos desubicados. Esto se debe al miedo a que nos juzguen y nos etiqueten, lo que acarrea que al final ocultemos nuestros verdaderos intereses y nos pongamos una máscara para no lidiar con ciertas situaciones.
"Uno no puede ser uno mismo de manera absoluta cuando se está en público, porque estar en público ya te obliga a cierta autodefensa”
-John Lennon-
EL VALOR DE LA AUTENTICIDAD

   A veces negamos que nos guste cierta música o que estemos interesados en unas aficiones pero no en otras. En otros momentos podemos incluso obviar u omitir información sobre nosotros que nos solicitan o que estaríamos encantados de contar.

   De esta manera, poco a poco, vamos dejando de ser nosotros mismos de cara a los demás o incluso en nuestra vida interna, lo que es mucho más grave y más preocupante.

   O sea, no comportarnos como nos gustaría acaba mermándonos, esto genera un empobrecimiento emocional que nos deja sumidos en una característica mezcla de tristeza, melancolía y desgana. Esto, por supuesto, tiene sus consecuencias en nuestras relaciones, que a su vez se tornan cada vez más insatisfactorias.

   Sin embargo, a veces encontramos personas con las que podemos ser nosotros mismos y con las que nos conseguimos sentir realmente bien sin tapujos. Gracias a ese empuje nos permitimos liberarnos de esas ataduras emocionales y empezar a ilusionarnos de nuevo.

   Lo cierto es que este tipo de conexiones no abundan, por lo que tenemos que apreciar cada uno de los momentos que vivimos junto a ellos, ya que nos ayudan a contemplarnos y a trabajarnos en esencia.
"La amistad con uno mismo es de suma importancia, ya que, sin ella uno no puede ser amigo de nadie más en el mundo”
-Eleanor Roosevelt-
SÉ TÚ CON TOTAL LIBERTAD

   Como hemos comentado hasta ahora, ser uno mismo con total libertad es bastante complicado ya que depende en gran medida de lo cómodos que nos sintamos con los demás. Sin embargo, el verdadero trabajo a realizar nos corresponde a nosotros; es decir, que ser uno mismo requiere de autoconocimiento y por supuesto de motivación para ello. En este sentido, vamos a analizar qué podemos hacer:
  •    Acéptate, eres una persona única e irrepetible. Es normal que quieras mostrar una versión más deseable de ti a los demás, pero no es necesario. De hecho puede llegar a ser contraproducente ya que nuestra parte más amigable es la natural.
  •    No te centres en la imagen que los demás tienen de ti, hazlo en cómo tú te consideras. Esto nos ayuda a ser más auténticos y espontáneos.
  •    Tu valía no depende de cómo es con lo que te comparas. Todos tenemos ideales y valores, pero esos no dependen de los demás. Es importante que trabajes para ser cada vez mejor, pero no para parecerte o superar a nadie.
   Uno de los retos más difíciles es ser nosotros en un mundo en el que la mayoría está tratando de aparentar ser alguien más. Valorarnos es costoso, pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo.
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Espero te sea de utilidad, Blanca


lunes, 24 de octubre de 2016

Los abrazos activan la química cerebral del bienestar, la calma y la alegría, incluso a largo plazo

Por: Dra. Margot Sunderland
Extraído de: La ciencia de ser padres
Fuente: http://formacionterramater.es/

  Los niños “tocan base” cuando están corriendo alegremente y, de repente, se sientan en el regazo de mamá o de papá, se apoyan en ellos o buscan algún tipo de contacto. Esta actitud puede durar segundos, o apenas unos minutos. Enseguida vuelven a sus juegos. Esto se llama “reabastecimiento emocional” y sirve para crear un precioso equilibrio químico en sus cerebros. Si tu hija o hijo se comporta así contigo, te hace un gran cumplido: te considera una fuente natural de opioides cerebrales.

PapaCanguroiiStock1Ene25.jpg.imgw.1280.1280   Tanto nuestro cuerpo como nuestro cerebro secretan hormonas, poderosas sustancias químicas que nos pueden hacer sentir muy bien o muy mal. Normalmente, pensamos en las hormonas solo en relación con nuestra sexualidad, pero existen muchos tipos que nos afectan de muchas maneras en nuestros sentimientos, percepciones y comportamientos.

Un paraíso hormonal

   La neurocientífica Candace Pert afirma: “Cada uno de nosotros tiene su propia farmacia de lujo al precio más económico, que produce todos los medicamentos que podemos necesitar para el buen funcionamiento del cuerpo y la mente”. Las hormonas y sustancias que nuestros cuerpos y cerebros producen nos permiten prosperar. El problema es que, por culpa del estrés en la infancia, mucha gente nunca encuentra los medicamentos más sofisticados de la “farmacia de la mente”.
   Cuando en el cerebro predominan los opioides y la oxitocina, el mundo es un lugar cálido y acogedor.

Cuando se activan conjuntamente estas sustancias neuroquímicas nos pueden generar la más profunda sensación de calma y satisfacción, y la capacidad de hacer frente a todas las tensiones de la vida. Si proporcionas a tu hijo muchas experiencias tempranas de sosiego afectuoso, conocerá el repetido predominio de los opioides y la oxitocina en su cerebro. Se sentirá seguro, tranquilo y amado. Será más capaz de:
  • saborear las cosas
  • disfrutar del momento
  • seguir adelante sin aferrarse a las situaciones
   Si experimenta esos estados neuroquímicos regularmente, saludará al mundo con interés y regocijo, y no con miedo y recelo. Es más, al mismo tiempo reunirá fuerzas para hacer frente eficazmente a los momentos dolorosos y estresantes de la vida, que ningún ser humano puede evitar.

Un infierno hormonal

   Si un niño experimenta a menudo miedo y rabia en la infancia, sentimientos que pueden derivar de un estilo de crianza estricto que conlleva gritos, ordenes, críticas y expresiones faciales iracundas, la secreción de opioides y oxitocina puede quedar bloqueada en su cerebro. Sin el alivio de la calma, el consuelo y el cálido afecto físico, su cuerpo y su cerebro se acostumbrarán a unos niveles altos de cortisol, adrenalina y noradrenalina, sustancias químicas que producen las glándulas adrenales en los momentos de estrés. Como resultado, el niño se puede sentir amenazado e inseguro en todo momento.

   Cuando el cuerpo y el cerebro contienen elevados niveles de la hormona cortisol durante largas épocas, el mundo se convierte en un lugar hostil.

abused-268x300   El alto nivel de cortisol nos hace sentir abrumados, temerosos y desdichados, tiñe nuestros pensamientos, sentimientos y percepciones con una sensación de amenaza o terror inminente, como si todos nuestros actos fueran demasiado graves.

   También la adrenalina y la noradrenalina pueden incidir fuertemente en nuestro estado de ánimo. Obligan al corazón a latir con más fuerza, al hígado, a secretar glucosa, a los tejidos adiposos, a liberar sustancias grasas y a los músculos, a movilizar las reservas energéticas. Cuando se encuentran en sus niveles óptimos, estas hormonas nos mantienen alerta y con la mente despejada; sin embargo, como el cortisol, cuando se activan en exceso nos producen ansiedad, enfado o ambas cosas. No podemos desprendernos de una sensación de amenaza. Las investigaciones demuestran que las experiencias infantiles más tempranas determinan en gran medida si se verán regularmente afectados por elevados niveles de sustancias estresantes cuando sean mayores. En este caso, la persona vivirá un infierno en la tierra, un estado persistente de hiperexcitación. Se sentirá amenazada gran parte del tiempo. Por desgracia, esa sensación de inseguridad se puede convertir en su forma de entenderse a sí misma y a los demás. Como resultado, vivirá en un estado crónico de desconfianza y adoptará una de estas dos posturas fundamentales: huirá de la vida o librará una guerra contra ella.

El contacto físico libera oxitocina, la hormona del amor, la calma y la sanación


   No podemos inyectar oxitocina a los niños y adultos, porque la sustancia no viaja al cerebro. Tampoco la podemos administrar por vía oral. ¡Solo el cálido contacto humano puede activar en el cerebro la liberación de estas sustancias! Si queremos que los niños sean capaces de sentirse tranquilos y seguros en el mundo, debemos asegurarnos de que el contacto físico reconfortante y el consuelo físico cuando hay estrés formen parte integral de su vida.

Cualquier tipo de contacto físico cálido entre padres e hijos tiene efectos positivos

Dad-and-son-300x292   Los abrazos y los mimos, los pequeños apretones afectuosos, los masajes infantiles y dormir en los brazos de mamá tienen un efecto maravilloso en los pequeños. Todos estos momentos compartidos con una madre o un padre afectuoso activan los opioides y la oxitocina en el cerebro infantil. Cuando el niño reposa junto a una madre tranquila, habrá una cascada de oxitocina y opioides en su cerebro. Esto será delicioso y satisfactorio para ambos. Para que esto ocurra, es importante que la madre esté relajada. Hay que controlar los estados de ánimo, porque estar junto a la niña o el niño estando ansiosa o tensa provocará en ella o él la secreción de sustancias químicas estresantes.

No olvides mimar a los mayores de cinco años tanto como a los bebés

   Los asombrosos efectos del contacto físico en el cerebro son también poderosos en los niños mayores. Es más, si sigues la costumbre de mimarles hasta la adolescencia (mientras te lo permita, desde luego), habrá muchas menos tensiones entre vosotros cuando sea adolescente. Es así porque la oxitocina activada por los mimos conservará el lazo opioide y la relación de confianza durante mucho más tiempo.
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Espero te sea de utilidad, Blanca


domingo, 23 de octubre de 2016

Cuando quedarte accidentado ya no es un problema en Venezuela


Bajo esta premisa se lanza al mercado venezolano una innovadora APP que conecta a los accidentados con los grueros más cercanos por medio de GPS, en menos de 30 minutos y a nivel nacional, prestando un servicio activo las 24 horas del día durante todo el año


Octubre, 2016.- Existen pocas opciones para obtener asistencia en casos de accidentarse su vehículo en Venezuela. Bajo esta premisa nace TU/GRUERO® , la mejor opción para los conductores venezolanos de todas las edades.

Ante esta realidad, tres jóvenes venezolanos, Carlos Echeverria, Alejandro Echeverria y Carlos Heinze, se asociaron ante el pésimo servicio de grúas existente en el país, donde las persona esperaban entre 4 y 5 horas para ser auxiliados por un gruero, lo que resulta demasiado peligroso en las condiciones actuales de inseguridad que vive el país.

“Estudiamos el mercado y observamos que existía una oferta de grueros más que suficiente para la cantidad de accidentados que ocurren en Venezuela, lo que faltaba era algo o alguien que los conectara y creamos TU/GRUERO”, comenta Alejandro Echeverria, Director Ejecutivo y encargado de Comercialización y Mercadeo.


Alrededor de 7 meses fueron invertidos en el desarrollo de esta APP, la cual es la primera aplicación de teléfonos inteligentes enfocada para el auxilio vial. Ésta conecta a los accidentados con las grúas más cercanas vía geolocalización, permitiéndoles obtener un servicio rápido, eficiente y seguro, simplemente con tocar un botón.

Carlos Heinze, Director Ejecutivo del área de Operaciones y Captación de personal, afirma que “TU/GRUERO® apunta a ser la plataforma tecnológica número uno a nivel nacional e internacional en auxilio vial, teniendo la red de grueros más amplia, trabajando con el 100% de las compañías de seguro existentes y la mayor cantidad de personas no aseguradas del mercado”.

Entre los beneficios de TU/GRUERO podemos mencionar: servicios de grúas y taxis en toda Venezuela, que funciona las 24 horas de los 7 días de la semana y durante los 365 días del año. Además garantizan el servicio de rescate en menos de 30 minutos, ya que cuentan con un equipo de más de 2.000 grueros a nivel nacional y una búsqueda por GPS del gruero más cercano.

“Nuestros grueros son los más calificados del país y nuestra aplicación móvil es muy amigable y está disposnible para IOS y Android. Entras, ingresas tus datos (cédula, placa y compañía de seguro), eliges la situación en la que te encuentras, colocas tu destino y solicitas la grúa”, así lo asegura Carlos Echeverria, Director Ejecutivo del área de Finanzas y Ventas, quien además indica que, tras 5 meses operando, “TU/GRUERO es la solución perfecta para el auxilio vial en Venezuela y llegamos para mejorar por completo la industria”.

En la actualidad trabajan en estrecha alianza con el mercado asegurador, por lo que TU/GRUERO funciona como intermediario directo entre el accidentado y los grueros más cercanos dispuestos a auxiliar, siempre y cuando el accidentado esté asegurado con una compañía de seguros afiliada a esta empresa. No obstante, a la brevedad sus servicios podrán ser utilizados por cualquier persona que no tenga su vehículo asegurado.

Cabe destacar que sus servicios no se limitan sólo a la aplicación, poseen un Call Center donde las personas pueden llamar y solicitar el servicio de grúa, ya que en Venezuela existen zonas donde no hay cobertura de datos móviles y que existen usuarios que no poseen o usan teléfonos inteligentes.

TU/GRUERO también ofrece un plan prepagado de grúas anual llamado TU/GRUERO PLUS, que es un servicio ilimitado de grúa en todo el territorio nacional con los mismos beneficios y la calidad del servicio, incluyendo la aplicación móvil.

Este emprendimiento 100% venezolano busca establecerse y crecer en el mercado venezolano ofreciendo sus servicios a las compañías de seguro y sus planes prepagados (TU/GRUERO PLUS) al público en general. A largo plazo esperan internacionalizar en Latinoamérica (Chile, Colombia, México, Argentina, etc.).


Si quieres conocer más sobre los servicios de este emprendimiento síguelos por su web www.tugruero.com y sus redes sociales: TU/GRUERO en Instagram, Facebook y twitter.
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Espero te sea de utilidad, Blanca

viernes, 21 de octubre de 2016

Enfermedades de transmisión espiritual

Por: Mariana Caplan

Fuente: https://surrendertolife.wordpress.com

la-soledad-en-el-camino-del-despertar-600x280   ¿Realmente pensamos que sólo porque alguien ha estado meditando desde hace cinco años, o hace diez que práctica yoga, va a ser menos neurótico que la persona de al lado? A lo sumo, tal vez será un poco más consciente de ello. Un poco. Es por esta razón por la que pasé los últimos quince años de mi vida investigando y escribiendo libros sobre el cultivo del discernimiento en el camino espiritual en todas las áreas arenosas (poder, sexo, la iluminación, los gurús, los escándalos, la psicología, la neurosis) así como las serias, pero también confusas e inconscientes, motivaciones en el camino.

   Como he conocido a cientos de maestros y miles de practicantes espirituales a través de mi trabajo y viajes, he sido golpeada por la forma en que nuestro punto de vista espiritual, perspectivas y experiencias acaban siendo “infectadas” por “contaminantes conceptuales”, dando lugar a una relación confusa e inmadura con los complejos principios espirituales. Estos “contaminantes” son invisibles pero tan insidiosos como enfermedades de transmisión sexual.

   La siguientes clasificación no está destinada a ser definitiva, pero se ofrece como una herramienta para la toma de conciencia de algunas de las “enfermedades de transmisión espiritual” más comunes.

1. Espiritualidad de comida rápida.
   Mezcla la espiritualidad con una cultura que celebra la velocidad, la multi-tarea y la gratificación instantánea y el resultado es probable que sea espiritualidad de comida rápida. La espiritualidad de comida rápida es un producto de la fantasía común y comprensible de que el alivio del sufrimiento de nuestra condición humana puede ser rápido y fácil. Una cosa es clara: la transformación espiritual no se puede tener en una solución rápida.
2. La espiritualidad de imitación.
   La espiritualidad de imitación es la tendencia a hablar, vestirse y actuar como nos imaginamos que una persona espiritual lo haría. Se trata de un tipo de espiritualidad que imita la realización espiritual en la forma en que la tela de piel de leopardo imita a la piel real de un leopardo.
3. Motivaciones confusas.
   A pesar de que nuestro deseo de crecer es genuino y puro, a menudo se mezcla con otras motivaciones, entre ellas el deseo de ser amado, el deseo de pertenecer, la necesidad de llenar nuestro vacío interior, la creencia de que el camino espiritual nos liberará de nuestros sufrimientos, y la ambición espiritual (el deseo de ser especiales) de ser “mejor que”, y ser “el elegido”.
4. Identificarse con las experiencias espirituales.
   En esta enfermedad, el ego se identifica con nuestras experiencias espirituales y las toma como propias, y empezamos a creer que estamos encarnando ideas que han surgido dentro de nosotros en determinados momentos. En la mayoría de los casos, no dura indefinidamente aunque tiende a perdurar por largos periodos de tiempo en los que se creen iluminados y/o que funcionan como maestros espirituales.
5. El ego espiritualizado.
   Esta enfermedad ocurre cuando la propia estructura de la personalidad del ego se mezcla arraigada y profundamente con conceptos espirituales e ideas. El resultado es una estructura del ego que es “a prueba de balas.” Cuando el ego se espiritualiza, somos invulnerables a la ayuda, a la nueva información o a la retroalimentación constructiva. Nos convertimos en seres humanos impenetrables y estancamos nuestro crecimiento espiritual, todo ello en nombre de la espiritualidad.
6. La producción en masa de los maestros espirituales.
   Hay una serie de tradiciones espirituales de moda en la actualidad que producen personas que creen estar a un nivel de iluminación espiritual, o maestría, que está mucho más allá de su nivel real. Esta enfermedad funciona como una cinta transportadora espiritual: ponte en este resplandor, consigue aquella visión, y¡ bam! estás iluminado y listo para iluminar a otros en forma similar. El problema no es que estos profesores instruyan sino que se presentan como si hubiesen alcanzado la maestría espiritual.
ego-einstein7. El orgullo espiritual.
   El orgullo espiritual se produce cuando el practicante, a través de años de esfuerzo, en realidad ha alcanzado un cierto nivel de sabiduría y usa ese logro para justificar el cierre a más experiencias. Una sensación de “superioridad espiritual” es otro síntoma de esta enfermedad de transmisión espiritual. Se manifiesta como una sutil sensación de que “yo soy mejor que otros, más sabio, y por encima, porque yo soy espiritual.”
8. La mente del grupo.
   También se describe como pensamiento de grupo o mentalidad de culto. La mente de grupo es un virus insidioso que contiene muchos elementos de la codependencia tradicionales. Un grupo espiritual tiene acuerdos sutiles e inconscientes con respecto a la forma correcta de pensar, hablar, vestirse y actuar. Los individuos y los grupos infectados con “mente de grupo” rechazan a las personas, las actitudes y circunstancias que no se ajusten a las normas, a menudo no escritas, del grupo.
9. El complejo del pueblo elegido.
   Es la creencia de que “Nuestro grupo está más evolucionado espiritualmente, es más potente, inteligente y, en pocas palabras, mejor que cualquier otro grupo”. Existe una importante distinción entre el reconocimiento de que uno ha encontrado el camino correcto, el profesor adecuado, o la comunidad correcta para sí mismos, y el haber encontrado “al elegido”.
10. El virus mortal.
   “Yo he Llegado”: Esta enfermedad es tan potente que tiene la capacidad de ser terminal y mortal para nuestra evolución espiritual. Esta es la creencia de que “he llegado” al objetivo final de la senda espiritual. Nuestro progreso espiritual termina en el punto donde se concreta esta idea en nuestra mente, porque el momento en que comenzamos a creer que hemos llegado al final del camino, un mayor crecimiento se detiene.

   Una parte fundamental del aprendizaje de discernimiento en el camino espiritual es descubrir la enfermedad del ego y auto-engaño que está en todos nosotros.
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Espero te resulte de interés, Blanca


jueves, 20 de octubre de 2016

La gente buena también dice que no

Por Raquel Rús
Fuente: http://hekay.es/

   Es habitual que a terapia llegue alguien y deje caer un comentario del tipo “qué buena era mi madre, todo la parecía bien siempre”. Al que suelo contestar con una pregunta “¿cuidaba de sí misma?”. Todavía no me he encontrado a nadie que me conteste afirmativamente.

   Tenemos un concepto de bondad un tanto distorsionado. Aquella persona que siempre nos dice que sí, la que nunca se queja, la que jamás pone un límite, la que pone a los demás por delante de sí misma… Una persona que hace ésto o bien está negando sus propias necesidades, pero tenerlas las tiene, o bien espera que alguien averigüe cuáles son y las cubra. Ambas opciones en el corto plazo son bienvenidas, en el largo suelen traer problemas.

Aprender-a-decir-no   Y es que, tarde o temprano esas personas explotan. Bien echando en cara lo realizado por los demás o bien poniéndose enfermas. Lo que todos queremos es poder manifestar nuestras necesidades sin miedo, porque la gente buena que siempre dice sí esconde mucho temor a que los rechacen, a lo que pensarán de ellos, a parecer malos o a hacer daño. Conozco a más de una persona que teme a la asistenta que le limpia la casa y no le dice lo mal que lo hace ¡por no molestarla! Si la base de nuestros actos es el miedo, éstos no pueden ser sanos.

   Leyendo por Internet encontré no hace mucho una frase que me encantó “no puedes hacer feliz a todo el mundo, no eres un bote de Nocilla”. Qué gran verdad. La necesidad de agradar constantemente a los demás es una enfermedad, una falta de respeto a nosotros mismos y, aunque de primeras pueda parecer lo contrario, también lo es hacia los demás.

descarga   Cuando no decimos de verdad lo que sentimos por miedo a hacer daño estamos asumiendo que el otro no puede gestionar lo que ocurre, y eso es una manera de menospreciarlos. Como si nosotros fuéramos muy adultos y ellos niños que pudieran enrabietarse. Para evitarlo habitualmente lo que hacen las personas a las que les cuesta poner límites es usar alguna de las siguientes estrategias:

1. Esperar a que el otro se aburra: Pongamos que me han invitado a un cumpleaños al que no puedo ir, quizás para no decir que no cuenten conmigo voy dejando para más tarde dar una respuesta. Ciertamente eso no es decir que no y con ello podemos asumir que el otro no se molestará, aunque en realidad lo que hacemos es tenerle esperando con la falsa esperanza de que iremos.
2. Mentir: Para no tener que decir claramente lo que sentimos o pensamos o las circunstancias que nos impiden decir que sí, nos inventamos una excusa.
3. Manipular: Convencer al otro de que en realidad quiere algo diferente a lo que desea en realidad para no tener que enfrentarnos.
4. Evitar encuentros: Con el objetivo de no ver a la persona a la que tenemos que poner algún tipo de límite. Eso genera una tremenda distancia en nuestras relaciones.
5. Decir que sí cuando quiero decir que no: Generando el consiguiente resentimiento, ya que espero que el otro se dé cuenta de mis necesidades y las escuche, cuando soy yo quien no hace ni lo uno ni lo otro.

   Todas estas estrategias no suenan muy “bondadosas”, más bien son un tipo de agresión pasiva. Al no hablar claro generamos muros en nuestras relaciones, así como frustración externa e interna. Todo lo contrario a lo que en realidad deseamos: estar cerca de los demás y ser queridos.

   Lo curioso es que cuando se pregunta a la gente qué características tiene alguien a quien de verdad admira suele contestar: dice lo que piensa y está seguro de sí mismo. Es decir, que es una persona que pone límites.

   Las personas a las que les cuesta decir “no” se sienten inseguras, no queriendo molestar, están enfadadas consigo mismas o resentidas con las demás. Mientras que los que se animan a poner límites miran dentro de sí mismos, conectan con sus necesidades y las manifiestan. Por ello son capaces de respetar las necesidades de los demás aunque no las comprendan, y aceptan un no por respuesta. Saben poner límites y los aceptan, porque son sanos. Incluso animan a aquellos a quienes les cuesta decir lo que necesitan a hacerlo, porque se interesan de corazón por ellos. Es una señal de confianza básica para tener relaciones profundas y honestas.

   Lo malo es que muchos relacionamos poner límites con estallar, ser bruscos o groseros. Esto es así porque de tanto aguantar y callar, cuando decimos lo que queremos lo hacemos desde el dolor interno. En cambio, al volverlo una práctica habitual en nuestra vida, podremos negarnos con calma, con seguridad, con sinceridad y con respeto. ¿Qué el otro lo toma mal? Será porque él mismo no sabe poner sus límites. Es muy cómodo tener a alguien cerca que siempre dice que sí, aunque lo cómodo no es necesariamente lo sano. Si una persona es incapaz de respetar lo que somos y necesitamos, quizás no sea la persona adecuada para estar en nuestra vida. Ninguna relación sana se basa en el miedo, sino en el amor.

   La gente buena es la que tiene bondad, eso quiere decir que se respeta y respeta a otros, que mira lo mejor para todos, que busca relaciones sinceras. Eso, en muchísimas ocasiones, implica dar un “no” por respuesta.
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Espero te resulte de interés, Blanca