Fuente: http://reikinuevo.com/principios-meditacion/
¿Cuándo meditar?
Cuando nos encontremos en calma. Algunas personas dicen que la mañana es el mejor momento para meditar, lo mismo dicen de la tarde, justo cuando el sol comienza a desaparecer.
Las energías del ambiente a esas horas del día son ideales para estar tranquilos y serenos, dos temas clave para buscar el sitio adecuado y conectar con nuestro silencio interior.
Pero como siempre decimos, no hay formas, no hay reglas, uno es sabio y conoce el momento perfecto para hacerlo.
La repetición
Como siempre dice un gran amigo, la repetición es el camino del aprendizaje. La rutina diaria es fundamental, es como “una gimnasia”, un ejercicio con el que vamos a conectar todos los días y para hacerlo nos tiene que salir de la forma más natural posible.
Para “ejercitar” la rutina diaria podrías buscar un lugar especial, tumbarte en una cama o sentarte en un sitio cómodo, recuerda, no hay formas.
Una pequeña recomendación, hazlo siempre a una hora determinada, la idea es acostumbrarnos a tener todos los días un momento de paz, silencio y tranquilidad.
La concentración
Un momento antes de hacer la meditación dile a tu cuerpo, a tu Divinidad, tu Yo superior o como le quieras llamar que vas a meditar, que vas a vivir ese momento con cada una de tus células. Olvida el pasado, deja que el futuro llegue cuando deba llegar y ponte con ello.
La posición
Esto es muy relativo, el mejor consejo es que busques la posición con la que te sientas más cómodo. Algunas personas sugieren hacerlo mirando hacia el norte o al este para obtener más beneficios que da la energía en esas direcciones pero, sinceramente, si estás comenzando a conectar con la práctica de la meditación, lo mejor es hacer lo que sientes. Recuerda, hazlo cómodo y relajado.
El lugar
Si puedes hacerlo, busca un sitio tranquilo, limpio, en silencio y donde haya tranquilidad. No es fundamental, por que cuando sepas conectar con la meditación fácilmente lo podrás hacer en cualquier lado pero si durante tus comienzos puedes hacerlo, busca un sitio como el que describimos, te será más fácil conectar contigo mismo.
Puedes encender una vela, un incienso, flores naturales, etc.
La respiración
Hemos dicho infinidad de veces que la meditación es lo primero con lo que debes conectar a la hora de meditar. La respiración profunda te ayudará muchísimo a encontrar ese espacio de calma y tranquilidad que necesitas para meditar.
Recuerda que puedes respirar de varias formas, si sigues el enlace a la etiqueta Respiración, podrás acceder a varios artículos con técnicas y ejercicios que te serán de utilidad.
Concéntrate en tu respiración y ya estarás meditando.
La visualización
Si vas a meditar solo sin seguir una meditación guiada como la que tantas veces hemos compartido aquí, lo más recomendable es buscar un punto de tu cuerpo para enfocar tu atención y concentrarte. Tu corazón, el “tercer ojo” o el punto que tienes entre las cejas podría serlo. Te recomendamos que siempre sea el mismo. Enfoca tus pensamientos en dicho lugar, cierra los ojos y visualízalo.
Los mantras
Algunas personas utilizan un mantra a la hora de meditar, los sonidos repetitivos de los maneras cargados de energía pueden ayudarte.
La constancia
Repite esta práctica todos los días y no esperes resultados inmediatos, la constancia es fundamental, trabájala todos los días.
Cuida tu constancia y en el momento menos pensando te convertirás en otra persona y podrás elevar y mantener tu vibración cambiando completamente tu vida.
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Espero te sea de utilidad, Blanca
Muchas gracias yo siempre lo hago en las mañanas antes que comiense a salir el sol 05:30 es excelente esta hora para sentirte renovado claro eso ya depende de cada persona
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