¿Te atreves a mirar dentro de ti?

Autor: Pepe Cabello

Tomado de: http://www.eldiadecordoba.es/article/opinion/1995309/te/atreves/mirar/dentro/ti.html  

Aún recuerdo un curso al que asistí hace años por recomendación de unos amigos. ¡Vas a alucinar!, me decían; ¡Todo va a cambiar a partir de este curso! Yo asistí, reconozco que lleno de expectativas enormes y deseando ver y sentir ese cambio tan profundo y radical que me habían prometido.

El fin de semana pasó y yo volví a casa decepcionado. No había pasado nada. El orador era bueno, dentro de lo que hay en el mercado; los demás compañeros del curso estaban como en una nube; decían repetidamente: "Ha sido espectacular". Estas palabras sólo hacían que mi enfado fuera creciendo cada vez más. Aquello quedó en el olvido como una experiencia desagradable por mi parte y, lo peor, es que durante años pensé que el problema era del curso o del orador… ¡Qué ingenuo!

Hoy, por alguna razón, me acordé de esta experiencia y me dio risa y lástima darme cuenta de lo que me perdí porque estaba buscando algo que tenía que pasar fuera de mí. Mi compromiso por llegar a un resultado grande me hizo perderme lo que estaba ocurriendo allí mismo, delante de mis propias narices… Perdón, ni siquiera delante… sino dentro de mí. Por años creí que el proceso no podría ser la meta y qué equivocado estaba… La meta era el propio proceso.

El coaching me ha enseñado que el proceso es el objetivo. Centrarme en lo que me está pasando a mí a raíz de lo que está pasando fuera de mí es la clave del crecimiento. Muchas personas asocian el crecimiento personal y la evolución al conocimiento de la materia y, si no obtienen avance en conocimientos, se frustran porque el compromiso por aprender cosas les hace perderse lo que ocurre cuando vives cosas.

El fin de la vida es la evolución; de hecho, la propia felicidad radica en vivir el momento presente sin pelearte con lo que está pasando y, menos aún, con lo que estás esperando que pase. De hecho, muchas veces no pasa nada porque se genera una "guerra interna" que no nos deja avanzar y nos compromete en buscar razones que justifiquen el porqué me siento así. Es como estar enganchados a ideas de las que nos enamoramos y sólo buscamos evidencias que sostengan esas ideas para así sentir y demostrar que tenemos razón… Maldita droga esta.

Claro que hay que desear que pasen cosas. Llevo años diciendo esto y luchando por mis sueños, inspirando a todas las personas que puedo a que lo hagan igualmente, que luchen por los suyos. Pero debemos de recordar que para crecer debo observarme lo suficiente como para saber que lo que me molesta; es mi próximo punto de crecimiento. La mayoría de las personas sólo quieren crecer a base de sentirse bien, de estar cómodos y de no tenerse que enfrentar a aquellas cosas que les molestan y les duelen. Es importante recordar que los seres humanos sólo crecemos cuando nos incomodamos, es decir, cuando salimos de nuestra zona de confort.

Por cierto, quien puso el nombre a "zona de confort" erró en un detalle. A confort le sobra la "t", porque puede confundir y hacernos creer que "confort" viene de "confortable" y no es así; "confort" viene de "conformarme", es decir, "tomar forma de…". En este "tomar forma de…" entra tomar forma de mis habilidades, de mis conocimientos, tomar forma de mis creencias, de mis ideales, tomar forma de mi enfermedad, de mis rutinas… Cualquier cosa que me acomode y no me deje crecer me está sosteniendo dentro de mi zona de confort.

Te invito a que desafíes tus comodidades y salgas fuera… fuera de ti. Que te atrevas a experimentar lo que de niño hacías con total naturalidad: ¡Vivir en un continuo crecimiento y evolución! Revisa lo que te molesta de tu alrededor y pregúntate ¿qué debo de cambiar yo en esta situación?, ¿qué aprendería de esto que me molesta si sólo pudiera dejar de molestarme tras un aprendizaje?, ¿qué hay en mí para que esto me moleste?, ¿con qué quiero estar comprometido, con defender lo que yo creo o con crecer?

Coaching tiene que ver con ser un insolente con lo que eres hoy, con aceptar e integrar lo que eres y donde estás y, a partir de estar en paz contigo mismo, atreverte a soñar y a dar el primer paso para que aquello que deseas se cumpla. Si te enamoras de lo que eres hoy, de lo que sabes hoy y de lo que tienes hoy, es posible que estés cómodo, pero no te garantiza seguir creciendo. Es clave ser agradecido con lo que somos, hacemos y tenemos hoy, muy importante… pero debemos de seguir soñando.

Recuerda algo muy importante, dar el primer paso no te garantiza que llegues, pero si te garantiza que ya no estás en el lugar que estabas… ¿Te atreves?

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Espero te sea de utilidad, Blanca