Por: Maite Nicuesa Guelbenzu
Hacer un gestión eficaz del tiempo implica recordar que las horas son un recurso limitado puesto que la existencia de un ser humano es temporal.
Te damos las claves para gestionar tu agenda de forma proactiva:
1. En primer lugar, es adecuado utilizar una agenda en la que hacer las anotaciones sobre los recados, reuniones de trabajo y asuntos pendientes que hay que atender. Cada noche, echa un vistazo a tu agenda para comprobar qué asuntos tienes que atender al día siguiente. Es adecuado que cada día, dejes un hueco de alrededor de dos horas en tu agenda para poder atender posibles imprevistos. Tener una buena planificación es una de las claves del éxito.
2. La formación constante te permite obtener nuevas competencias. En ese caso, podrías animarte a realizar un curso sobre gestión del tiempo. A través de la formación, podrás corregir errores y descubrir fórmulas para potenciar el aprovechamiento de la jornada laboral.
3. Existen personas que tienden a posponer para otro momento esas
actividades que suponen un esfuerzo emocional añadido. Lo más apropiado
es comenzar la jornada atendiendo esos asuntos porque una vez que
resuelves esas gestiones, el resto de la jornada fluye mejor.
4. Establece un orden de prioridades para poder actuar de forma coherente con ese esquema de intereses personales. Este orden de prioridades es totalmente subjetivo, es decir, cada persona tiene unas metas diferentes.
5. El tiempo nunca se pierde, simplemente, en ocasiones, no se utiliza de forma óptima.
6. Integra pequeños descansos a lo largo de la jornada laboral porque es esencial desconectar. La mente no una máquina y no puede mantener una concentración constante porque el descanso es salud.
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Espero te sea de utilidad, Blanca
1. En primer lugar, es adecuado utilizar una agenda en la que hacer las anotaciones sobre los recados, reuniones de trabajo y asuntos pendientes que hay que atender. Cada noche, echa un vistazo a tu agenda para comprobar qué asuntos tienes que atender al día siguiente. Es adecuado que cada día, dejes un hueco de alrededor de dos horas en tu agenda para poder atender posibles imprevistos. Tener una buena planificación es una de las claves del éxito.
2. La formación constante te permite obtener nuevas competencias. En ese caso, podrías animarte a realizar un curso sobre gestión del tiempo. A través de la formación, podrás corregir errores y descubrir fórmulas para potenciar el aprovechamiento de la jornada laboral.
3. Existen personas que tienden a posponer para otro momento esas
actividades que suponen un esfuerzo emocional añadido. Lo más apropiado
es comenzar la jornada atendiendo esos asuntos porque una vez que
resuelves esas gestiones, el resto de la jornada fluye mejor.4. Establece un orden de prioridades para poder actuar de forma coherente con ese esquema de intereses personales. Este orden de prioridades es totalmente subjetivo, es decir, cada persona tiene unas metas diferentes.
5. El tiempo nunca se pierde, simplemente, en ocasiones, no se utiliza de forma óptima.
6. Integra pequeños descansos a lo largo de la jornada laboral porque es esencial desconectar. La mente no una máquina y no puede mantener una concentración constante porque el descanso es salud.
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