Tomado de: http://www.elartedesabervivir.com/articulos/351
Como Mary Robinson dijo una vez: "Nadie puede
volver atrás y comenzar de nuevo, pero cualquiera puede comenzar hoy mismo y
hacer un nuevo final." Nada podría estar más cerca de la verdad. Pero
antes de poder iniciar este proceso de transformación tienes que dejar de hacer
las cosas que te han estado deteniendo.
Aquí tienes algunas ideas para
comenzar:
1.
Deja de gastar el tiempo con las personas equivocadas
La vida es
demasiado corta para pasar tiempo con personas que te quitan la felicidad. Si
alguien te quiere en su vida, harán espacio para ti. No deberías tener que
luchar por un lugar. Nunca, nunca insistas en alguien que constantemente pasa
por alto tu valor. Y recuerda, no es la gente que está a tu lado en tu mejor
momento, sino los que están a tu lado en tu peor momento, tus verdaderos amigos.
Como dijo J.F. Kennedy: "El éxito tiene muchos padres, pero el fracaso es
huérfano".
2.
Deja de huir de tus problemas.
Enfréntalos
con la cabeza en alto. No, no será fácil. No hay persona en el mundo capaz de
manejar a la perfección cada golpe que le arrojan. No se supone que somos
capaces de resolver problemas al instante. Así no es como estamos hechos. De
hecho, estamos hechos para enojarnos, ponernos tristes, sentir dolor, tropezar
y caer. Porque ese es todo el propósito de la vida - enfrentar los problemas,
aprender, adaptarse, y resolverlos en el transcurso del tiempo. Esto es lo que
en última instancia, nos convierte en la persona que llegaremos a ser.
3.
Deja de mentirte a ti mismo
Puedes
mentirle a cualquiera en el mundo, pero no puedes mentirte a ti mismo. Nuestras
vidas mejoran solamente cuando tomamos las oportunidades, y la primera y más
difícil oportunidad que podemos tomar es ser honestos con nosotros mismos.
4.
Deja de poner tus propias necesidades en un segundo
plano.
La cosa más
dolora es perderte a ti mismo en el proceso de amar a alguien demasiado (tu
pareja, tus padres, tus hijos, tus hermanos), y olvidar que también eres
especial. Sí, ayuda a los demás, pero ayúdate a ti mismo también. Si alguna vez
hubo un momento para seguir tu pasión y hacer algo que te importe a ti, ese
momento es ahora.
5.
Deja de intentar ser alguien que no eres.
Uno de los
mayores desafíos en la vida es ser tú mismo en un mundo que está tratando de
hacerte igual a todos. Siempre habrá alguien más guapa, siempre habrá alguien
más inteligente, siempre habrá alguien más joven, pero nunca serán tú. No
cambies para gustarle a la gente. Sé tú mismo y a las personas correctas les
encantará el verdadero tú.
6.
Deja de aferrarte al pasado.
No puedes
comenzar el siguiente capítulo de tu vida si sigues releyendo el último.
7.
Deja de tener miedo a cometer un error.
Hacer algo y
hacerlo mal es por lo menos diez veces más productivo que hacer nada. Cada
éxito tiene una estela de fracasos detrás de él, y cada fracaso está conduciendo
hacia el éxito. Terminas lamentando las cosas que no hiciste mucho más que las
cosas que hiciste.
8.
Deja de reprenderte por los errores del pasado.
Se puede
amar a la persona equivocada y llorar por las cosas equivocadas, pero no
importa cómo las cosas van mal, una cosa es segura, los errores nos ayudan a
encontrar a la persona y las cosas que son perfectas para nosotros. Todos
cometemos errores, tenemos luchas, e incluso lamentamos las cosas en nuestro
pasado. Pero tú no eres tus errores, no eres tus luchas, y estás aquí AHORA con
el poder de dar forma a tu día y tu futuro. Cada cosa que ha ocurrido en tu
vida te está preparando para un momento que está por venir.
9.
Deja de intentar comprar la felicidad.
Muchas de
las cosas que deseamos son caras. Pero la verdad es que las cosas que realmente
nos satisfacen son totalmente gratis? el amor, la risa y el trabajo en nuestras
pasiones.
10. Deja de
mirar exclusivamente a los demás para ser feliz.
Si no estás
feliz con lo que eres por dentro, tampoco serás feliz en una relación a largo
plazo con nadie. Tienes que crear la estabilidad en tu propia vida antes de
poder compartirla con alguien más.
11. Deja de ser
inactivo.
No pienses
demasiado o crearás un problema que ni siquiera estaba allí en primer lugar.
Evalúa las situaciones y toma medidas decisivas. No puedes cambiar lo que te
rehúsas a confrontar. Avanzar implica un riesgo. ¡Punto! No puedes llegar a la
segunda base con el pie en la primera.
12. Deja de
pensar que no estás listo.
Nadie se
siente 100% listo cuando surge una oportunidad. Las oportunidades más grandes
en la vida nos obligan a crecer más allá de nuestras zonas de confort, lo que
significa que no nos sentiremos totalmente cómodos al principio.
13. Deja de
involucrarte en relaciones por las razones equivocadas.
Las
relaciones deben ser elegidas con prudencia. Es mejor estar solo que estar mal
acompañado. No hay necesidad de precipitarse. Y esto se puede trasladar a todo
tipo de relación, ya sea personal, laboral o profesional. Si hay algo que está
destinado a ser, va a suceder - en el momento adecuado, con la persona
adecuada, y por la mejor razón. Enamórate cuando estés listo, no cuando estés
solo.
14. Deja de
rechazar nuevas relaciones sólo porque las antiguas no funcionaban.
En la vida
te darás cuenta de que hay un propósito para todos los que conoces. Algunos te
pondrán a prueba, algunos te utilizarán y algunos te enseñarán. Pero lo más
importante, algunos sacan lo mejor de ti.
15. Deja de
intentar competir contra todos los demás.
No te
preocupes por lo que otros hacen mejor que tú. Concéntrate en vencer tus
propios records cada día. El éxito es una batalla entre tú y tú mismo
solamente.
16. Deja de
estar celoso de los demás.
Los celos
son el arte de contar las bendiciones de otra persona en lugar de las tuyas propias.
Pregúntate lo siguiente: "¿Qué es algo que yo tengo y que todos los demás
quieren?"
17. Deja de
quejarte y sentir lástima por ti mismo.
Las curvas
de la vida existen por una razón - para cambiar tu trayectoria en una dirección
que está destinada para ti. No puedes ver o entender todo lo que ocurre en un
momento, y puede ser difícil. Sin embargo, reflexiona sobre las curvas
negativas lanzadas sobre ti en el pasado. A menudo verás que con el tiempo te
llevaron a un mejor lugar, persona, estado de ánimo o situación. Así que
¡sonríe! Que todos sepan que hoy eres mucho más fuerte que ayer, y lo serás.
18.
Deja de
guardar rencores.
No vivas tu
vida con odio en tu corazón. Vas a terminar perjudicándote a ti mismo más que a
la gente que odias. El perdón no está diciendo: "Lo que me hicieron está
bien.", está diciendo: "Yo no voy a dejar que lo que me hiciste
arruine mi felicidad por siempre." El perdón es la respuesta... deja ir,
encuentra la paz, libérate a ti mismo. Y recuerda, el perdón no es sólo para
otras personas, es para ti también. Si debes perdonarte a ti mismo, sigue
adelante y trata de hacerlo mejor la próxima vez.
19. Deja de
permitir que otros te bajen a su nivel.
Niégate a
bajar tus estándares para dar cabida a aquellos que se niegan a elevar los
suyos propios.
20. Deja de
perder el tiempo explicando a los demás.
Tus amigos
no lo necesitan y tus enemigos no van a creer de todos modos. Sólo haz lo que
sabes en tu corazón que es correcto.
21. Deja de
hacer las mismas cosas una y otra vez sin descanso.
El momento
para tomar un profundo respiro es cuando no tienes tiempo para ello. Si sigues
haciendo lo que estás haciendo, seguirás consiguiendo lo que estás recibiendo.
A veces es necesario tomar distancia para ver las cosas con claridad.
22. Deja de
pasar por alto la belleza de los pequeños momentos.
Disfruta de
las pequeñas cosas, porque un día puedes mirar hacia atrás y descubrir que eran
las cosas grandes. La mejor parte de tu vida serán los pequeños momentos,
aquellos que pasas riendo con alguien que te importa.
23. Deja de
intentar hacer las cosas a la perfección.
El mundo
real no recompensa a los perfeccionistas, premia a las personas que logran
terminar las cosas.
24. Deja de
seguir el camino de menor resistencia.
La vida no
es fácil, especialmente cuando se piensa en lograr algo que vale la pena. No
tomes el camino más fácil. Haz algo extraordinario.
25. Deja de
actuar como si todo está bien si no lo está.
Está bien
desmoronarse por un rato. No siempre tienes que pretender ser fuerte, y no hay
necesidad de demostrar constantemente que todo va bien. No debes preocuparte de
lo que piensan los demás. Llora si es necesario - es saludable derramar tus
lágrimas. Cuanto antes lo hagas, más pronto serás capaz de sonreír de nuevo.
26. Deja de
culpar a otros por tus problemas.
La medida en
que puedes alcanzar tus sueños depende de la medida en que tomas la
responsabilidad de tu vida. Al culpar a otros de lo que está pasando, niegas tu
responsabilidad - le das a otros poder sobre esa parte de tu vida.
27. Deja de
intentar ser todo para todos.
Hacerlo así
es imposible y al intentarlo sólo te quemarás. Sin embargo, hacer sonreír a una
persona puede cambiar el mundo. Tal vez no a todo el mundo, pero sí su mundo. Así que afina tu objetivo.
28.
Deja de
preocuparte tanto.
Preocuparte
no te liberará de las cargas de mañana, sino que te alejará de la alegría que
tiene el día de hoy. Una forma de comprobar si hay algo sobre lo que vale la pena
reflexionar es hacerte la siguiente pregunta: "¿Este asunto importará
dentro de un año? ¿Tres años? ¿Cinco años?". Si no, entonces no vale la
pena preocuparse.
29. Deja de
centrarse en lo que no quieres que suceda.
Concéntrate
en lo que sí quieres que suceda. El pensamiento positivo está a la vanguardia
de cada gran historia de éxito. Si te despiertas cada mañana con la idea de que
algo maravilloso va a suceder en tu vida hoy, y prestas mucha atención, a
menudo te darás cuenta de que tienes razón.
30.
Deja de
ser ingrato.
No importa
cuán bien o mal lo pasas, despierta cada día agradecido por tu vida. Alguien
más en algún lugar está luchando desesperadamente por los suyos. En lugar de
pensar en lo que te estás perdiendo, trata de pensar en todo lo que tú tienes y
que los demás se están perdiendo.
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Espero te sea de utilidad, Blanca
Muy cierto y muy bello lo que dices...gracias Blanca...
ResponderEliminarGracias a tí por leerme Anita, Un besito
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